Hola. Mi nombre es Sarahí y soy adicta a facebook.

Facebook es la herramienta número uno de comunicación desde su creación en el 2004 por Mar Zuckerberg. El proyecto escolar que lo hizo millonario es ahora un medio básico, fácil e indispensable para nuestra generación ( y las que vengan) para establecer un contacto permanente con aquellos conocidos y medio desconocidos (ahí ya depende de cada quién).

44/7 es el tiempo establecido para que te puedas informar de - literal - las actualizaciones de tus contactos vía mensajes, fotos, comentarios de terceros, videos y aplicaciones. La necesidad de tener facebook se puede equiparar con la existencia de uno mismo para ser considerado en el tejido social ¿virtual o real?

La privacidad dejó de ser privada

Si quiero saber información de alguien en especial, en lugar de ir y preguntarle personalmente, lo que hacemos es entrar a su facebook y leer su "biografia", sus gustos y lo  que la gente dice de él. Es tan fácil. La realidad tiene que ir en paralelo con la vida virtual. El cambio de relaciones, pensamientos random, nuevos amigos y fotos de perfil son cambiadas en tiempo real absorbiendo cada vez más el tiempo de convivencia "en vivo". Cada vez hacemos menos preguntas y stalkeamos más.

Acortar distancias no es su único objetivo. Cada vez más marcas y empresas salen a la luz gracias a la publicidad en FB y su alcance. El contacto con tu jefe y con gente relevante se establece a través de este medio. Bueno dejaré de escribir lo que todos saben y empezare a escribir lo que pocos conocen:

"Eliminé mi cuenta"

Esa fue la frase más fuerte que le pude decir a mis amigos hace 15 días. Y sí, lo hice. ¿Qué significó? Primero, fue un alivio no tener que enterarme de la vida vanal y poco existencial de gente que realmente no me interesa. Mi suicidio social no era tan suicidio como pensé.

Segundo, me aislé de eventos y cumpleaños, asi como eventos sociales. No compartí mis fotos de esos días ni mis pensamientos. Gracias a Dios, porque esos días estaba vulnerable. Tercero, recibí quejas sobre la desaparición de fotos gracias a mi ausencia de albums. Dejaba un pequeño hueco en el espacio de los demás pero no un hueco de mi presencia. Eliminas cuenta y ya no existes. Cuarto, me aliviané al saber que pocos se enterarían de mis locuras...¡espera! Yo no quiero eso. Y por último, decidí que quiero seguir existiendo en la vida de los demás como reafirmación de mi propia vida y así poder existir, aunque bien sabemos que sigo viva.

Quiero mejorar mi promedio y tener convivencia real con amigos reales en tiempo real. Regrese a la vida virtual, pero con mis limitaaciones. Limited profile al por mayor, seguro. El wall está clausurado. Quiero recibir llamadas en mi cumpleaños o que mínimo gasten esos 85 centavos para ese mensaje personal. Quiero que me cuenten como estuvieron sus vacaciones y no ver sus fotos XXX. Si. Eso es lo que quiero. Nada de farmville ni aplicaciones de Paquita la del barrio. Quiero dejar de ser esos gorditos que nos mostraba la película de Disney: Wall-E, en donde habían perdido el significado de conocer a una persona en persona.

Mi nombre es Sarahí Panecatl y soy adicta a facebook.